Primera semana en Japón

3 comments | in | about Viajes | marzo 9, 2014

Estoy roto, molido, pero muy contento. No hemos parado. Tengo la sensación de llevar aquí un año, pero solo han pasados unos días. Cuando viajas, creas infinidad de nuevos recuerdos en tu cerebro y eso hace que tengas la sensación de que ha transcurrido mucho tiempo. Todo lo contrario que cuando entras en una rutina, en la que cada día es el igual al día anterior, por lo que pueden pasar los años en un chasquido de dedos. Así que digamos que viajar, al menos en mi caso, ¡me alarga la vida!

Os pongo un resumen con lo más destacado de los primeros 3 días y algunas fotos 🙂 Me faltarán los 3 días siguientes que completaré mañana… ¡antes de que pasen más cosas y se me acumule todo!

Martes 4 y miércoles 5

El martes y miércoles por la mañana ya os lo conté en este otro post.

La noche del miércoles fuimos a cenar con Kirai, Carlos y Antonio a la zona de Shibuya. Tres españoles que llevan un porrón de años en Japón y son unos auténticos expertos en el tema. Nos contaron muchas historias y nos enseñaron algunas palabras y frases básicas en japonés. Aparte nos hicieron probar varias platos que no conocíamos: edamames y un pescado que desafió nuestra habilidad con los palillos.

Estaba lloviendo bastante y saqué un par de fotos con el móvil rollo Blade Runner.

IMG_20140305_180903

Jueves 6: Visita al parque Senzokuike y Akibahara

Para firmar el contrato del alojamiento que alquilamos en Ueno, tuvimos que ir al sureste de Tokyo. Así que lo primero era ir a la Estación de Ueno.

_DSC0654

Como soy un panzas y era la hora de comer, convencí a Laurie para buscar un restaurante de Ramen por la zona y casualmente había una en la misma estación. No tenía nombre en caracteres occidentales, así que escribí los kanjis (caracteres japoneses) como buenamente pude y lo encontramos preguntando. Aquí tenéis la dirección, por si os interesa.

Esto de los ramen es como los arrozes en España, son muy distintos según donde los comas y encima depende de los gustos de cada uno. Este que comí aquí no estaba mal, aunque aquel ramen mítico que tomé en Kamakura en 2010 lo recuerdo bastante mejor. Así que supongo seguiré explorando la zona y probando todos los «ramenes» distintos que pueda.

_DSC0401

Si conoces un buen restaurante de ramen en Tokyo… ¡déjame un comentario!

Por cierto, si eres novato en esto, ten una cosa en cuenta a la hora de pedir ramen. Si lo pides con picante, el nivel de «normal» puede que sea en realidad «demasiado«. A mi me gusta el picante y aún así me pareció fuerte de más.

Tras comer fuimos a la estación, destino la oficina de alojamiento. Igual que en la calle, bastante japoneses llevaban mascarillas en los vagones. Antes de que os asustéis, comentaros que no es por la polución, ya os lo explicaré más adelante 🙂

_DSC0415

_DSC0453

_DSC0455

Tras liarnos un poco con la línea de metro y la línea de tren Yamanote (que no tienen nada que ver una con otra aunque pensábamos que los billetes nos valdrían) conseguimos llegar a la oficina.

La agencia estaba ubicada en la segunda planta de un edificio bastante cutre, con un restaurante Koreano en la planta de abajo. Lo de utilizar el espacio al máximo es vital en Tokyo.

_DSC0432

La chica que nos atendió era una japonesa de pura cepa, mucho «Javi-sama» y «Laurie-sama«, que es la manera formal de dirigirse a un cliente en Japón, muchas inclinaciones e infinitas gracias. El cliente en Japón es sagrado. Esta es una de las cosas que más te chocarán cuando vengas de visita, lo bien que te van a tratar en todos sitios.

Parque Senzokuike

Tras firmar el contrato, y ya que estábamos por esa zona, aprovechamos para visitar un parque que había cerca. Le he dedicado una entrada con más detalles y fotos aquí: Paseo por el Parque Senzokuike, Tokyo.

_DSC0496

Akibahara y Super Potato

Tras visitar el lago aún nos quedaba bastante tiempo, así que nos animamos a ir a Akibahara, el barrio friki por excelencia. Akibahara, el paraíso sobre la tierra, situado a tan solo 30 minutos andando de nuestra casa en Ueno (eso en Murcia es «como irte a Bullas», pero aquí en Tokyo es tenerlo cerca, cerca). Puedes leer la entrada completa aquí, con fotos de las «maids», Super Potato y Akihabara de noche: Paseo por Akihabara.

IMG_20140306_172348

Tras esto, se nos hizo de noche, así que fuimos a un supermercado a comprar la cena. No les va mucho el queso ni los embutidos, así que poco de eso encontramos. Eso sí, había mil y un cosas extrañas para nosotros y que no habíamos visto en la vida. Espero ir conociéndolas y probándolas poco a poco. Los precios no eran demasiado caros, excepto los la fruta, que en Japón es muy cara: cada naranja valía aproximadamente 60 céntimos de euro

_DSC0629

Y de allí de vuelta a casa, después de un día muy especial.

Viernes 7: Mercadillo Ameyoko y Asakusa

Este día hacía un frío que pelaba. Lo primero que hicimos al levantarnos (no demasiado pronto) fue una visita por un mercadillo de Ueno llamado Ameyoko, donde puedes encontrar casi cualquier cosa que puedas imaginar.

_DSC0687

Y tras eso, echamos a andar dirección a Asakusa para dar un paseo por la famosa calle Nakamise.

IMG_20140307_174119 (1)

Por la tarde habíamos quedado con Carlos en la estatua de Hachiko en Shibuya para ir a un evento de Google Glass que orquestaba Kirai. Había pizza y cerveza gratis así que nos juntamos un buen puñado de españoles que por supuesto se conocían ya de varios años todos ellos: Rodrigo (Zordor), Luis, Pablo, Carlos y el propio Héctor (Kirai) que nos echó la foto.

BiSnaLzCYAAbnH3 (1)

Las Google Glass la verdad es que resultaron ser un poco una desilusión. Al menos allí en el momento no les encontré mucha utilidad. Pero bueno, ya tengo mi foto rollo gurú-bizco (joder, no hay forma fácil de mirar recto con eso puesto):

IMG_20140309_024443

Y Laurie tiene su foto con orejitas muy «kawaii» (que significa «bonito» en japonés o más bien «cute» en inglés) que responden a las emociones. Se supone que el pinganillo que toca la frente examina tus ondas cerebrales y sabe si estás feliz, emocionado, asustado, triste o lo que toque y las orejitas reaccionan en consecuencia moviéndose y tal. Como decía Pablo, más bien parecía que fueran algo aleatorias 😀

IMG_20140307_212541

Luego, el grupete de españoles nos fuimos a cenar por ahí a un restaurante en el que se pedía la comida con una especie de tablet (¡muy cómodo!) y nos estuvieron contando batallitas acumuladas en todos estos años de darlo todo por Tokyo. La verdad es que se lo han montando realmente bien y tienen historias que te partes de risa, vivir en Japón da para unas cuantas anécdotas.

Tras eso, la idea era retirarse, dado que eran las 00:30 y el metro cierra a esa hora. Nos llevaron hasta la estación y nos despedimos, pero al subir al metro, este se paró en la siguiente parada y allí nos hicieron bajarnos… ¡ya no había más metros!

Así que teníamos tres opciones: volver a casa a pata (unas dos horas y media o más), volver a casa en taxi (y gastarnos cerca de 30€ o 40€) o irnos de fiesta a Roppongi que estaba cerca y hacer tiempo hasta las 5 de la mañana que abriría de nuevo el metro. ¡La decisión estaba clara! 🙂

¡Nos fuimos claro está a Roppongi a darlo todo! Entramos en el «Hub» que es una especie de cadena de pubs irlandeses. A los 10 minutos ya se nos habría presentado un par de chicos y una chica japoneses que nos invitaron a cerveza y pizza (esto de los japoneses invitando a extranjeros desconocidos no era la primera vez que nos pasaba, así que no nos pilló de sorpresa). Uno de ellos llevaba tal borrachera que mezclaba japonés, inglés y español (era un japonés de mundo, incluso había estado saliendo con una mexicana).

Tras estar en el Hub un buen rato y conocer a otros españoles y en general muchos Gaijin («extranjeros») nos fuimos a un karaoke cercano con los japoneses hasta que nos dieron las mil.

Y luego de vuelta a casa demacrados en el metro 😀

Sábado 8: Paseo por Yanaka, Tokyo

Nos levantamos bastante tarde porque estábamos muy cansados y algo resacosos, así que nos tomamos el día con calma. Por la tarde fuimos a dar un paseo por un barrio cercano al de Ueno que respira un ambiente muy clásico, alejado de la intensidad del centro de Tokyo. Puedes leer más detalles y ver fotos aquí: Paseo por Yanaka y la zona de Love Hotels.

_DSC0946-2

El tema del cementerio con los gatitos y los japoneses como locos haciéndoles fotos y acariciándoles me llamó bastante la atención 🙂

Domingo 9: Yoyogi

FALTA: Voy escribiendo por aquí: Parque Yoyogi y y Tashekita Street

Comentarios (3)

Si quieres dejar un comentario puedes hacerlo directamente escribiéndome en Twitter: @javilop